Parecería que con esa respuesta el asunto quedaría ahí, pero no, no es eso lo que sucede. Vienen luego más preguntas, preguntas encontradas entre sí.
- Si no hace ninguna diferencia, ¿para qué querés que pase?
- Si no hace ninguna diferencia, ¿por qué no ha pasado aún?
No tengo respuesta a esas preguntas, así que siguen dando vueltas en mi cabeza de vez en cuando, torturandome un poco. Me siento culpable por tener esas preguntas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario